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LEGISLACION ADUANERA.

Interesado el Gobierno en conocer estudiadamente la Legislacion Aduanera de los principales Estados europeos, para proyectar en el país las reformas aconsejadas por la experiencia, ó las necesidades creadas por una legislacion adversa, se dirigió la circular que va publicada á continuacion, recomendando á nuestros Representantes Diplomáticos todas las informa ciones tendentes á formar la opinion conciente de los poderes públicos cuando llegue el caso de contraerse al exámen de los aranceles y disposiciones fiscales del

caso.

Las "Memorias" que en respuesta á la referida circular se han recibido hasta la fecha, son las que corren agregadas y cuyas importantes indicaciones cúmpleme recomendar á la elevada consideracion de V. H.

Circular á las Legaciones Argentinas en Europa.

Ministerio
de

Relaciones Exteriores

Buenos Aires, Julio de 1890.

Señor Ministro: El Gobierno de que tengo el honor de formar parte, se preocupa sériamente de las modificaciones que se vienen produciendo en las leyes aduaneras de algu nos Estados de la Europa y del acentuado espíritu proteccionista que parece contar con el apoyo de no Locos Gobier

nos de ese Continente.

Las tendencias económicas que manifiesto, han inspirado en el país alarmas justificadas, por cuanto pueden comprometer la exportacion de los productos argentinos afectando la riqueza nacional en el juego necesario de sus intercambios; situacion á la que es menester anticiparse con medidas defensivas perfectamente permitidas por la autonomía de nuestras aduanas ó con actos conciliadores que estaría dispuesto á practicar este Gobierno, consultando siempre la observancia de los pactos solemnemente celebrados.

S. E. el Señor Presidente de la República está dispuesto á proponer al H. Congreso reformas aduaneras que sin ser agresivas para Estado alguno, sean especialmente eficaces para la defensa de los gremios productores que se empeñan en buscar la circulacion legítima de la riqueza nacional en los mercados extranjeros y me ha encargado especialmente recomendar á las Legaciones acreditadas en Europa la observacion y el estudio de estos graves problemas.

El Ministerio á mi cargo recibirá con viva satisfaccion las conclusiones á que V. E. llegue, al estudiar las importaciones argentinas fuertemente gravadas en esa plaza comercial, como las que se sientan detenidas por tarifas excesivas, así como el

espíritu que anima á ese Gobierno en el sentido de reducirlas ó elevarlas; en el caso último me sería tambien satisfactoria la opinion de V. E. sobre los productos de ese mercado que más se indiquen para una fuerte imposicion en nuestra aduana como medida recíproca.

Mucho espera este Gobierno de la ilustracion que V. E. tiene acreditada en el desempeño de su elevado cargo y desea verla al servicio de un estudio detenido sobre las tarifas nacionales relacionado con las de ese país á objeto de hacer sentir sérias reformas aduaneras sobre la importacion de los mercados que más se singularizan por la elevacion de sus gravámenes respecto de nuestros frutos.

Piensa el Señor Presidente de la República que las Legaciones Argentinas acreditadas en Europa deben llevar con preferencia la actividad de sus trabajos sobre la política económica, como deben especializarse con la internacional y diplomática las que están acreditadas en este Continente, donde las relaciones comerciales son escasas ó menos trascendentales para el movimiento de nuestra riqueza y no dudo que V. E. con el patriotismo que distingue sus actos dará pronto cumplimiento á las recomendaciones de la presente nota sobre materia tan positiva y provechosa para los intereses nacionales.

Me es siempre honroso y agradable reiterar á V. E. las seguridades de mi consideracion distinguida.

ROQUE SAENZ PEÑA.

MEMORIA.

Las Tarifas Aduaneras y el sistema proteccionista.

Legacion

de la

República Argentina en Suiza

I.

La reaccion del proteccionismo está hoy en pleno florecimiento, acentuado por la lucha económica internacional de las tarifas aduaneras, que tienden á reemplazar las luchas armadas por conquista ó protectorado de territorios al servicio de aquel interés comercial.

De un modo ó de otro, siempre es la lucha por la existencia, aunque en diferente forma, teniendo por armas los productos de la industria, por teatro de accion el comercio, y por campos de batalla los mercados.

El proteccionismo rodeado en su infancia, de una muralla de tarifas y una armadura de privilejios, que le aseguraban sin gran esfuerzo una balanza comercial limitada, sin la lucha de la concurrencia libre que multiplica las fuerzas productoras, el ingenio y perfeccionamiento industrial, obligado á mantener ó superar el nivel alcanzado por los demás, se encontró amenazado de parálisis y raquitismo con la escuela del libre cambio, representativa de la virilidad industrial en el palenque internacional de la industria y del comercio.

Ella levantó su bandera cuando el sazonamiento de su virilidad le permitió sostener con éxito la verdad de la teoria y la verdad de la práctica, que se complementan, cuando la segunda es el fruto de la semilla de la primera, sembrada en terreno fértil.

Es así como Inglaterra, con el profundo sentido práctico, que es la fuerza de sus instituciones y de su comercio, y con la

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