Montevideo por causas que no alcanza el que suscribe, al menos le será permitido invocar el recuerdo de ese pensamiento, discutido, acordado y puesto en ejecucion, para justificar la conviccion que ha tenido y que ha procurado seguir á su Gobierno de que el de V. E. por razones de propia seguridad y de alto interes nacional simpatizaba con la causa de la Confederacion Argentina, y con la eliminacion del Gobierno actual de Buenos Aires, cuyas tendencias espe ciales contra la Independencia y órden de este Estado, V. E. ilustradamente bosquejó en su nota de 12 de Enero ya citada.

Con esas fáciles disposiciones del Gobierno de V. E. coincidiò la comunicacion que hizo al infrascrito el Encargado de Negocios Argentino en el Janeiro, de una nota pasada por el Sr. Lamas, Ministro Plenipotenciario de esta República, en la que le participaba haber sido acordado con el Gobierno del Brasil, que la Escuadra de la Confederacion podria usar libremente de todos los puertos del Imperio y del Estado Oriental, por no ser propio someterla á las restricciones que estan vigentes para los buques de Buenos Aires, en razon de la diferencia de relaciones existentes. El infrascrito viò en esa correspondencia un nuevo reconocimiento de la intimidad que media entre el Gobierno de V. E. y el de la Confederacion, la que no podia ser desconocida al Representante Oriental ni al Gobierno del Brasil, que lo habian observado existente y desprendido en épocas muy notables para la tranquilidad y ventura de este Estado. Fundado pues en todos estos antecedentes y en otros que sería largo recordar, presumia el infrascrito que el Exmo. Sr. Presidente de esta Repúbli ca, no consideraba infringir el principio de la neutralidad que se ha impuesto, permitiendo el apresto y estacion de los buques Argentinos en este Puerto.

Consideraba el que firma que el Gobierno de V. E., neutral en todas las cuestiones que no afectan la tranquilidad y altos intereses de esta Republica, no se creeria sin embargo precisado á permanecer estrictamente indiferente, entre su amigo y aliado el Gobierno de la Confederacion Argentina, y el de la Provincia de Buenos Aires, que tan seriamente acababa de poner en peligro la paz y la prosperidad de este Estado. Y juzgaba que de esa natural deferencia, del interes general que todas las Republicas Americanas tienen en la conservacion integra de sus nacionalidades, y de la permanente inquietud del Gobierno de Buenos Aires, se derivaria la deferencia que la Escuadra Argentina esperaba, para terminar el armamento que habria principiado, en la seguridad que no era contrario á las vistas del Gobierno de V. E. y que lejos de ser opuesto al principio de la neutralidad, era perfectamente compatible con él, como V. E. mismo indica ha berlo considerado.

De esa conviccion en que el Gobierno Argentino ha estado hasel presente proviene que esta Division se encuentre hoy separada del resto de la Escuadra de la Confederacion y sin órdenes del Exmo.

Sr. Presidente y que haya sido muy sorprendente á esta Legacion la repentina notificacion que V. E. le hace, sin dejarle ni el tiempo necesario para trasmitirla á S. E. el Presidente de la Confederacion.

El infrascrito se permite recordar á V. E. que circunstancias muy graves,pensamientos muy serios que á V. E. no seràn desconoci. dos, han alejado momentáneamente, al Gefe Supremo de esta Division, General D. Benjamin Virasoro, y que en estos momentos es inmensa laresponsabilidad del movimiento de esta Escuadra. Sin embargo d todo lo manifestado, el infrascrito sabe ahora por las notas de V á que tiene el honor de contestar, que el Exmo. Sr. Presidente considera necesario el alejamiento de los buques Argentinos de las aguas Orientales; y por sensible que le sea llevar la notificacion de V. E. al conocimiento del Gobierno Argentino, que se mostró siempre tan solicito en favor de la Independencia de esta República, de la estabilidad de su órden Constitucional, cumplirá con el deber de hacerlo, asì como con el de dar las órdenes convenientes, para que la Escuadra de la Confederacion deje satisfechos los deseos del Exmo. Sr. Presidente, que V. E. le ha comunicado.

y

El infrascrito aprovecha esta oportunidad para reiterar á V. E. las seguridades de su mas distinguido aprecio.

Es copia conforme-A. de Brayer.

MARIANO BAUDRIX.

Es copia-El Subsecretario de Relaciones Esteriores.

Carlos Guido y Spano.

MINISTERIO DE RELACIONES ESTERIORES.

CIRCULAR.

Montevideo, Setiembre 1.o de 1859.

A Su Señoria D. Mariano Baudrix, Encargado de Negocios de la Confederacion Argentina.

El infrascrito, Ministro Secretario de Estado en el Departamento de Relaciones Esteriores, tiene el honor de dirigirse á Su Señoría D. Mariano Baudrix, Encargado de Negocios de la Confederacion Argentina, para adjuntarle un egemplar del acuerdo espedido con esta fecha, suspendiendo la resolucion adoptada con motivo de la interposicion del Sr. Ministro Residente del Imperio del Brasil, por la cual debian evacuar el puerto de Montevideo con intérvalo de horas,

las Escuadras de la Confederacion Argentina y de la Provincia de Buenos Aires.

Como en consecuencia de esa suspension, y desatendiendo las razones que la motivan, las fuerzas navales de Buenos Aires pudieran emprender hostilidades en este puerto, violando las inmunidades de un territorio neutral, y con perjuicio para intereses estrangeros igualmente neutrales residentes en la República, desea S. E. el Sr. Presidente sea conocida la justicia que ha presidido el mencionado acuerdo, à la vez que su resolucion de mantenerse neutral en la cuestion Argentina, y al efecto ha ordenado al infrascrito dirija al Sr. Baudrix la presente comunicacion.

Cumpliendo las órdenes de S. E., el infrascrito espera que Su Señoria se apercibirá de la gravedad de las circunstancias que en el caso previsto sobrevendrian, y que adoptará las medidas que esten á su alcance para ayudar al Gobierno de la República à hacer efec tivas las garantías que el Derecho de Gentes acuerda en los países neutrales á los intereses de los particulares, que permanecen estraños á la contienda suscitada.

El infrascríto aprovecha esta oportunidad para reiterar al Sr. Baudrix, las seguridadds de su mas distinguida consideracion.

ANTONIO DE LAS CARRERAS.

Es copia conforme-A. de Brayer.

Es copia-El Subsecretario de Relaciones Esteriores.

MINISTERIO DE GOBIERNO.

Carlos Guido y Spano.

Montevideo, Setiembre 1.o de 1859.

ACUERDO.

Considerando:-Que en el deseo de mantener la paz pública conquistada á costa de inmensos sacrificios, el Gobierno consultando los bien entendidos intereses nacionales, declarò que se mantendria neutral en la contienda que se debate por las armas entre la Confederacion Argentina y la Provincia de Buenos Aires:

Que consecuente con ese principio de neutralidad,modificado con respecto á dicha Provincia, por la situacion preexistente en la época en que se ha declarado abierta la lucha, resolviò por la interposicion amigable del Sr. Ministro Residente del Imperio del Brasil y en el interes de evitar las complicaciones á que podia dar un conflicto entre las Escuadras de la Confederacion Argentina y de Buenos Aires

en el puerto de Montevideo, que ambas se alejasen de estas aguas, mediante el espacio de treinta y seis horas entre la salida de una y otra: Que, sin embargo de que aun estan pendientes las satifacciones exigidas por el Gobierno de la República al de la Provincia de Buenos Aires, por las hostilidades y ofensas inferidas sin motivo ni razon fundada en los años de 1857 y 1858, era de esperarse que la circunspeccion con que ha procedido asi al adoptar aquella resolucion como en las que le han antecedido, fuera apreciada con la justicia debida por parte del Gefe de la Escuadra y Gobierno de Buenos Aires, valorando la elevacion é imparcialidad del espiritu que le guiaba en aquel proceder:

Que, por el contrario, han llegado à su conocimiento, despues de adoptada aquella resolucion, los partes del Comandante de dicha Escuadra, publicados oficialmente en la prensa periódica de aquella Capital; en los cuales es evidente la dañada intencion con que se da al proceder de e te Gobierno el carácter de forzado por la intimidacion producida con la presencia y maniobra de los buques de su mando, y presentándolo ante a quel pueblo y las demas naciones, humillado por la arrogancia descomedida de aquel Gefe; cuando aquel proceder de este Gobierno no importa mas que una prueba de su elevada imparcialidad:

Que circulando esos partes en la poblacion nacional y estranje ra por la transcripcion que de ellos han hecho los diarios de esta capital, han producido una agitacion y una alarma, á que el Gobierno no puede ser indiferente:

Que es uno de los principios de su conducta el mayor respeto á la dignidad nacional, conciliada siempre con la política que marca todos sus actos:

El Presidente de la República, en Consejo de Ministros acuerd: Art. 1. Suspéndense los efectos de la resolucion t mada el dia 31 de Agosto proximo pasado, mandando salir del Puerto de Montevideo las Escuadras de la Confederacion Argentina y del Gobierno de Buenos Aires, hasta tanto que se den por este al de la República las satisfacciones debidas por los agravios, que contienen los partes del Gefe de su fuerza naval, dirigidos á la Comandancia General de Marina; sin que esto importe una desviacion del principio de neutralidad que ha adoptado como base de su política y que esti decidido á sostener en cuanto sea compatible con el honor de la República y los derechos de su soberania.

Art. 2. Por el Ministerio de Relaciones Esteriores diríjase la correspondiente nota al de igual ramo del Gobierno de Buenos Aires, manifestando los agravios inferidos y exigiendo las debidas safacciones.

Art. 3. Por el mismo Ministerio ofíciese al Sr. Ministro Residente del Brasil y demas Agentes Diplomáticos acreditados en la República, haciéndoles conocer esta resolución á los efectos acordados.

tente.

Art. 4. Comuníquese, publiquese y dése al registro compe

PEREIRA.

ANTONIO DE LAS CARRERAS.

ANTONIO DIAZ.

CRISTOBAL SALVAñACH,

Es copia-El Susecretario de Relaciones Esteriores.

Carlos Guido y Spano.

MINISTERIO DE RELACIONES ESTERIORES.

Paraná, Setiembre 14 de 1859.

He recibido hoy una comunicacion del Encargado de Negocios Argentino en Montevideo de 2 del corriente, en que espone: que los diarios y cartas de Buenos Aires habian empezado á anunciar que el Sr. Pereira Pintos, Consul Brasilero en aquella Ciudad, se habia comprometido á ir á Montevideo y recabar del Gobierno Oriental In espulsion de la Escuadra de la Confederacion Argentina surta en ese puerto; que en efecto, el 28 de Agosto último, arribò á Montevideo el Sr. Consul, y el 30 del mismo se dejó ver allí la Escuadra pirática de Buenos Aires afectando batir á los buques Argentinos: que entonces y por la interposicion, segun parece, de S. E. el Sr. Amaral, Ministro Residente del Brasil en aquella Capital, intimò el Gobierno de Montevideo á nuestra Escuadra que saliera de aquel puerto, mas que este acuerdo fué derogado en la noche del 1 á consecuencia de esplosiones de la opinion pública irritada.

Agrega el Encargado de Negocios que con este acuerdo fracasó, (son sus palabras,)"las iniestra combinacion delGobierno de Buenos "Aires, confiada al Cónsul Pintos y favorecida aquí por el Sr. Ama"ral; combinacion cuya tendencia bien clara era la de entibiar y di "vidir, si era posible, las íntimas relaciones que ligan á la Confede"racion y el Estado Oriental."

Puesta en conocimiento de S. E. el Sr. Vice-Presidente de la República la estractada nota del Encargado de Negocios Argentino, me ha ordenado dirigirme á V. E, como tengo el honor de hacerlo, pidiéndole se digne trasmitir al Gobierno Argentino las esplicaciones que pudiere, acerca de los hechos denunciados.

Porque efectivamente, perdone V. E., nada sería mas estraño que ver á un Ministro del Gobierno Imperial á quien tanto aprecia el Argentino y con quien lo ligan tan íntimas y frecueu