>> En quanto al méthodo de dicho paso, ya hemos palpado los felices éxitos que produxo el que observó el S.r D." José Perfecto Salas, aquel varon sapientísimo, cuya memoria hará siempre honor a la América Meridional, quien sin embargo de sus vastas atenciones con el ministerio de ámbas Fiscalías de esta Real Audiencia desde que se erijió esta Universidad hasta que pasó de Asesor Jeneral al virreinato del Perú, mantuvo en su casa paso de Instituta para sus discípulos i demas profesores que concurrian en calidad de voluntarios.

» El estudio era por el comentario de Vinnio: en el 1. paso esplicaba la letra por dicho comento de la leccion correspondiente a un dia de estudio, i al dia siguiente volvian los discípulos la leccion, exponiendo cada parágrafo con la mas posible adherencia al Espositor i oian la esplicacion de la otra leccion. En el 2.o paso seguia el mismo órden de esposicion i en lugar de esplicacion se ponian las dificultades de cada § con que se hacia un consumado exercicio de quanto la materia ofrecia. En aquel mismo tiempo yo i otros pasamos este estudio bajo la conducta del Bachiller don Bernardo Araya, uno de los mejores discípulos que logró el S.' D." José Perfecto, i a los dos pasos en la forma espresada, añadimos otro tercero, en que despues de exponer cada texto, los cursantes mutuamente nos proponíamos los argumentos deducidos de L. L. valiéndonos de Pichardo i las leíamos orijinalmente en el cuerpo del dho. que estaba a la mano; i me parece que deberá seguirse este réjimen entre tanto obren las nuevas Constituciones.

> Aunque por la Constitucion que actualmente gobierna le toca al Rector proveer todo aquello que le parezca convenir al bien, utilidad, acierto i perfeccion de los estudios i a Vd. como a catedrático de Instituta, la execucion de tan preciso e interesante proyecto; con todo yo le suplico a Vd. haga este sacrificio de su jenerosidad en obsequio de la Escuela i de la Patria, empleando el buen estudio que hizo de la facultad sus distinguidas luces, aplicacion i empeñosidad en beneficio de una facultad que no tiene otro arbitrio ni recurso para poseer esta esencial disciplina i base fundamental del jurisconsulto; i como esta será una observancia anticipada de las nuevas Constituciones, con arreglo a ellas quedará Vd. con su clase relevado de las otras actuaciones de la facultad, i entre tanto aquéllas se aprueban i durante mi rectorado, miraré con predileccion este ramo i haré de substi tuto para suplir sus faltas. Así lo espero del favor de Vd. i el que me mandará en quanto sea de su agrado.

»D. g. a Vd. m.s an.s en esta su casa i mayo 19 de 1794.—Dr. F.o Xavier de Errázuriz.

»Sr Dr D. Miguel de Eizaguirre.»>

CAPITULO XV

DESARROLLO DE LA EDILIDAD

SUMARIO: Fundacion de las primeras ciudades en Chile.-Fisonomía jeneral de la traza de las poblaciones.-Los estranjeros en las nuevas ciudades.-Resistencia de los hacendados a la reduccion de pueblos.-La tarifa de «gracias al sacar» por títulos i armas de ciudades. - Abundancia de edificios para iglesias, monasterios i conventos.-Ramo de obras públicas.-El ramo de balanza: sus entradas durante 25 años (1762 a 1786).—La traslacion de Penco a Concepcion.-Un Obispo empecinado.-Conflicto con los jesuitas i con la autoridad administrativa.-Reparticion de solares en 1765.—La traslacion definitiva de Concepcion.-Los comerciantes de esa ciudad en 1765.-APÉNDICE.

Desde la época de Pedro de Valdivia fundar ciudades fué preferente atencion de los que pisaron nuestro suelo.

Si hubo algun error en ese insigne administrador fué en internarse demasiado, cuando todavía el «Rhin de los bárbaros chilenos», como en su Historia de Chile llama URIEL HANCOCK a nuestro Bio-Bio, no habia sido pasado de un modo definitivo. Llevó aquél al riñon de Arauco sus huestes; sus familias en formacion, ántes de la efectiva dominacion del territorio enemigo.

Pero su ojo previsor señaló con una nitidez admirable los tres puntos en que deberian agruparse los conquistadores. Al centro, Santiago, con

su puerto Valparaíso; al Sur, Penco con su cercana bahía de Talcahuano; al Norte, Serena, con su puerto Coquimbo. Tres elecciones sagaces.

No es nuestro ánimo estudiar el incipiente desarrollo de la edilidad en el siglo XVI i XVII. Esos trabajos tendieron siempre a evitar el desmigajamiento de los habitantes que preferian vivir esparcidos en los campos. La autoridad tuvo en mira producir la concentracion. Se comprende que la fundacion de pueblos no se efectúa por simples decretos.

En el siglo XVIII, cuando aun el crecimiento demográfico era tan ralo a sus principios, esa tentativa estaba condenada de antemano a fracasar. En 1703 se determinaba por el rei que todos los españoles que se hallaren en ranchos, haciendas i chacras, se redujeran i fuesen a vivir a las ciudades i poblaciones.

La ereccion de villas en los alrededores de los puntos en que buscan do la vida se agrupaban las jentes, podia solo en parte llevarse a la realizacion práctica.

1

Paulatinamente se fueron formando esos centros: Quillota en 1717, San Felipe en 1740, 1 Los Anjeles, Cauquénes i Talca (1742), San Fernando, Melipilla, Rancagua i Curicó (1743) i Copiapó (1744), debidos a la ini

1 Fué elejido superintendente jeneral para la poblacion al maestre de campo don José Marin de Poveda, marques de la Cañada Hermosa, por auto de 14 de agosto del año 1740. Al dia siguiente, el activo presidente firmaba, en San Ventura de Panquehue, en Aconcagua, el edicto relativo a las instrucciones relativas a la traza de la ciudad.

Aquel superintendente fué sustituido por el doctor D. Pedro Ignacio Urzúa i Ovalle, abogado en Lima i en Santiago de la Real Audiencia, con plenos poderes para la distribucion de solares i fijacion de calles i plazas.

En 1744 quedaban repartidos 192 solares; «50 casas» estaban cubiertas de teja i enmaderacion competente», segun informe de Juan Agustin Espinosa, a 20 de junio de ese año. (Capitanía Jeneral, vol. 937).

El primer correjidor (1740) fué D. Pedro de Lecaros i Ovalle i el 2.o correjidor en 1745 el abogado don Pedro Ignacio Urzúa Ovalle, que habia estudiado en Lima, i recibídose de abogado en aquella ciudad. Su nombre no lo he visto figurar en las listas de estudiantes chilenos en Lima que se han publicado.

ciativa del presidente Manso. Luego el gobernador Ortiz de Rozas, continúa esta obra echando las bases de Coelemu i la Florida (1751), Ca sablanca i Petorca (1753), Ligua (1754).

En cuanto a la distribucion material de calles, casas i solares, seguíanse mas o ménos uniformemente reglas que la lejislacion i la tradicion consagraron; de tal suerte que ver una ciudad es ver las demas a este respecto. En efecto, la traza de las ciudades tiene rasgos comunes, porque se seguian al pié de la letra las disposiciones legales sobre la materia. Así, en todas hállanse al rededor de las poblaciones que se fueron fundando ciertas porciones de tierras, de propiedad comun, que eran inalienables: ejido, para recreo de los pobladores, dehesas, para pastoreo i propios del municipio.

La planta de las ciudades semeja un tablero de ajedrez, ordinariamente orientado de norte a sur. Cada cuadra, o manzana, se divide por líneas que se cortan perpendicularmente, i que forman 4 solares. Este cuarto de manzana se repartia con relacion a la importancia de los pobladores, mas o ménos cerca o alejado del centro, que era la plaza principal.

Como ha observado BARROS ARANA, (VI páj. 184), la fundacion de pueblos no podia ser útil i eficaz mientras fuese tan solo la obra de un plan administrativo i artificial, i no el resultado del desenvolvimiento natural de la poblacion, i del acrecentamiento de su industria i de su riqueza. Esos pueblos fundados por la accion del Gobierno, faltos de industria i de esti mulos de progreso debian llevar una vida miserable, i aun casi desaparecer algunos de ellos, mientras no se cambiasen las condiciones jenerales de la

1 Este activo presidente contrajo su atencion al trabajo de las poblaciones. Respecto de la de San Fernando, en 22 de abril de 1744 encargaba a don Pedro de Gisbert i Talens, correjidor del partido, a don Pedro Delso, don Jnan Jiménez, supe:intendente de esta nueva poblacion, «formaran una exacta i verídica relacion del presente estado de ella, con espresion de los pobladores i vecinos que la componen, casas que hai en ella acabadas, i de las que están en estado de acabarse: las principiadas i solares cercados con las disposiciones de sus dueños para hacerlos». (Capitanía Jeneral, vol. 939).