Al estudio de la filosofía escolástica i del latin agregó el de las lenguas griega i hebrea (1).

Desgraciadamente se hallaba dotado de un carácter tan modesto que no pudo prestar los servicios públicos le llamaban su ilustracion i elevada cuna.

a que

Su obra toda fué silenciosa, i en gran parte consagrada a las sociedades de beneficencia.

Habria motivos para imajinar que este retraimiento de don Francisco, esta antipatía por la política i el bullicio del mundo, se debieron a las persecuciones de que fué víctima su familia en el gobierno de O'Higgins. Algunos caractéres se fortifican en la lucha; pero otros decaen i se apagan.

El alma del mayorazgo de Casa Real habria lucido en una situcion tranquila, nó en medio del combate.

Despues de la caida de O'Higgins don Francisco empezó a recibir nombramientos importantes, que él no aceptó siempre.

En 23 de diciembre de 1823 el Congreso Constituyente le nombró uno de los directores de la caja de descuentos, la cual habia sido creada para la adminis tracion de los capitales del empréstito de Irisarri (2).

García Huidobro envió su renuncia indeclinable de este cargo al Senado Conservador, con fecha 1. de enero de 1824.

< Las circunstancias actuales de mi casa, decia en su oficio, son sin duda de las mas estrechas i difíciles que ha tenido. Mi padre, rendido ya a los achaques i tra

(1) Datos de don Francisco Echáurren Huidobro, quien mantuvo relaciones mui estrechas con su tio don Francisco.

(2) BARROS ARANA, Historia Jeneral de Chile, tomo 14, pájina 159.

bajos que han amenazado sus últimos dias, ha dejado a mi cuidado el de todos los intereses i negocios de la familia, que ya no le es posible atender; éstos, bastantes por sí a ocupar todo mi tiempo i atencion, agravados por varias circunstancias desgraciadas, lo están sobre todo en el dia por el desembolso cuantioso de mas de cincuenta i tres mil pesos, a que se le ha condenado por una fianza; los recursos i resortes que sean necesarios poner en movimiento para verificarlo, cuando ya los han apurado o casi estinguido los contrastes de la revolucion, son demasiado notorios para que necesiten encarecimiento. El mal, sobre ser tan grave, es urjentísimo. Ninguno de mis hermanos puede por ahora desempeñar este cuidado. Estas consideraciones me han obligado a cargar sobre mí este peso enorme, con abandono. absoluto de mis intereses, cuando cuento ya perdido mi patrimonio i cuando motivos urjentes me llaman a salvar los últimos restos que han escapado a mi desgracia (1).»

El Senado aceptó esta renuncia en su sesion del 7 de enero.

I ésta es una buena oportunidad para tomar nota de la triste situacion pecuniaria a que fueron reducidas las familias realistas, entre las cuales se hallaban las principales de nuestra sociedad, en los primeros años que siguieron a la victoria de Maipo.

El cuadro completo de las contribuciones en dinero i de los secuestros que el gobierno de O'Higgins les impuso, i de las hostilidades, francas o encubiertas,

(1) VALENTIN LETELIER, Sesiones de los cuerpos lejislativos de la República de Chile, tomo 9.o, pájina 8.

que padecieron, daria la clave de acontecimientos políticos tan importantes como la abdicacion de 1823 i los trastornos de 1830.

Cuando una familia rica i poderosa se veia en las estrecheces de que habla uno de sus jefes en la renuncia ántes trascrita ¡qué seria de los innumerables hogares que, sin tener los recursos de los García Huidobro, se hallaban combatidos por la sociedad i el gobierno!

Con fecha 22 de octubre de 1825, don Francisco fué nombrado administrador de la Biblioteca Nacional, en reemplazo de don Manuel José Gandarillas, quien entró a ejercer el elevado cargo de ministro de hacienda.

García Huidobro aceptó este empleo, en el cual podia satisfacer su inclinacion al estudio, i que, por lo demas, correspondia a la modestia de su espíritu; i lo desempeñó hasta su muerte, sin retribucion alguna.

La Biblioteca adquirió bajo su direccion numerosas obras científicas i literarias publicadas en Europa, i un gran número de los libros, periódicos i folletos que aparecieron en Chile hasta el año de 1846.

En esta fecha se dictó la primera lei en que, por indicacion de García Huidobro, se impuso a los editores de nuestro pais la obligacion de depositar en la Biblioteca Nacional dos ejemplares de todos los impresos que dieran a luz.

A la administracion de García Huidobro pertenece el primer reglamento que tuvo la Biblioteca, dictado por el gobierno en 2 de octubre de 1834 (1).

(1) Algunos otros datos sobre este período de nuestra Biblioteca Nacional da don Luis Montt, actual director de ella, en una breve Noticia Histórica que hizo publicar en Paris, traducida al frances, en 1901, para el Congreso Internacional de Bibliotecarios.

En el mismo año en que tomó a su cargo la direccion de la Biblioteca Nacional, don Francisco García Huidobro i Aldunate fué elejido miembro de la junta protectora de vacuna.

Sus servicios en este ramo tuvieron tal importancia que, puede decirse, llenó el vacío dejado por el médico español Grajales.

Don Francisco ejercia la caridad por propio impulso, sin admitir sueldo en ninguna de las comisiones de esta clase que se confiaron a su celo.

Formó tambien parte de la Sociedad de Agricultores, de la Hermandad de Dolores i del Asilo del Salvador. Su caridad era inagotable i se sabe que favorecia secretamente con su fortuna personal a numerosas personas desvalidas.

En 1826 resultó elejido diputado propietario por Rancagua al Congreso Nacional, i se apresuró a renunciar este honroso cargo, por las mismas razones que habia dado al Congreso Constituyente para no admitir el empleo de director de la caja de descuentos; pero su renuncia no le fué aceptada en esta ocasion (1).

A pesar de esta circunstancia, don Francisco asistió mui pocas veces a las sesiones i se retiró del Congreso con la escusa de hallarse enfermo (2).

La revolucion triunfante en 1830 contó con las simpatías de la familia García Huidobro; i don Francisco fué elejido senador suplente por Concepcion en 1832. El mal estado de su salud le impidió incorporarse en

(1) Letelier, Sesiones de los cuerpos lejislativos de Chile, tomo 12, pájina 60.

(2) Letelier, obra citada, tomo 13, pájina 68.

aquel año, i solo pudo prestar el juramento de estilo en 11 de junio de 1833.

Don Francisco pertenecio en adelante a la Cámara de Diputados, para la cual recibió poderes en diversos períodos, i ejerció las funciones de presidente de ella en 1842; pero nunca tomó la parte que le habria correspondia en la direccion de los negocios públicos.

El ministro Portales le nombró en 8 de octubre de 1830, en compañía del eclesiástico don José Alejo Bezanilla i del farmacéutico don José Vicente Bustillos, para que ausiliara a don Claudio Gay en sus trabajos científicos.

Don Francisco no tuvo inconveniente para aceptar este encargo, como no lo habia tenido para la administracion de la Biblioteca; i desde el primer momento se estableció entre él i el sabio frances una amistad tan sólida que no se rompió jamas.

Así como el abate Molina habia bautizado una especie de mamíferos chilenos con el nombre de castor huidobrius, en prueba de cariño i estimacion por don José Ignacio García de Huidobro, así tambien don Claudio Gay quiso perpetuar en su botánica el recuerdo de su amigo don Francisco, i bautizó un jénero de la familia de las Loasáceas con el nombre de Huidobria (1), en estos términos:

«Loaseas. - Huidobria. - Lo dedicamos a nuestro apreciable amigo don Francisco García de Huidobro, persona tan recomendable por sus virtudes i modestia

(1) En las clasificaciones modernas se ha conservado este nombre para una seccion del jénero Loasa. Como se sabe, en Chile la familia de las Loasáceas es conocida bajo el nombre vulgar de ortiga caballuna. Datos del doctor Johow.