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Al Exmo. Senor

Don Manuel Montt, Presidente de lo. "Exina . Corte Suprema

la Exmo.

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se musi

Francisco de P.

Rohiquer Velaro

DEL DOCTOR

D. JOSÉ A. RODRIGUEZ ALDEA

I REFUTACION DOCUMENTADA DE LOS CARGOS QUE SE LE HACEN EN LA

OBRA TITULADA "OSTRACISMO DEL JENERAL O'HIGGINS.B. Vicuna

POR

FRANCISCO DE P. RODRIGUEZ VELASCO.
Tuis & Month

SANTIAGO,
IMPRENTA DEL FERROCARRIL,

CALLE DE LA BANDERA, NUM. 39.

1862

machenna

SA6497,18

Harvard College Library

Gift of

Archibald Cary Coolidge

and

Clarence Leonard Hay

April 7, 1909.

DOS PALABRAS AL LECTOR.

En el mes de junio del año próximo pasado tuvo lugar, ante el jurado de Valparaiso, un juicio de imprenta promovido por mí contra cierto pasaje de un ensayo histórico publicado en el Mercurio, en que se calumniaba la memoria i el buen nombre de mi finado señor padre, en su carácter privado. Un periódico de la localidad daha, pocos dias despues, cuenta de aquel juicio en los términos siguientes:

«El suceso mas notable ocurrido en la presente quincena es el juicio de imprenta promovido por don Francisco de Paula Rodriguez Velasco contra una publicacion hecha en las columnas del Mercurio, a propósito de su señor padre don José Antonio Rodriguez Aidea.

«Despojado este suceso de algunos de sus incidentes i de todo lo que él ha tenido de desagradable i enojoso, bastaria por sí solo para patentizar la excelencia del sistema representativo i las ventajas de la verdadera libertad.

«Un tribunal, compuesto de ciudadanos sacados a la suerte, ha tenido que fallar entre un escritor de nota, arrastrado al banco de los acusados, por algunas palabras lijeramente consignadas en un libro i reproducidas en un diario, i un hijo que defiende la memoria sagrada de su padre, ultrajada, segun él, i calumniada.

«Aparente i realmente este juicio, no pasa de una simple querella de injurias llevada ante el tribunal de imprenta; pero en el fondo, i atentas la importancia del personaje de que se t ata, i las calidades del acusador i del acusado, sale de los límites ordinarios para elevarse a la categoría de los grandes juicios históricos en que la opinion, mas o ménos estraviada, pretende muchas veces ocupar el lugar de la verdad o de la lei.

"Trátase, en efecto, de saber en do de empieza i donde acaba el derecho del escritor que, compulsando las historias i procurando darse cuenta de los sucesos del pasado, alza las lozas sepulcrales i llama a juicio a los personajes que mas o ménos directamente influyeron en el destino de las sociedades.

"En momentos en que por un impulso natural i noble se deja sentir en todas partes esa especie de furor cinerario, esa rebusca ardiente de crónicas contemporáneas que, a la par que sirven para ensayar el aliento de nuestros escritores públicos, echan las bases de una literatura nacional i reunen los elementos que han de servir mas tarde para organizar la historia de la América Española, no puede dejar de ser importantísimo el deslinde de derechos que parece haber pretendido el promotor del juicio de que nos ocupamos; i es bajo este doble aspecto que considera

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