a poner el mando de sus fuerzas en manos extranjeras : ella no puede ya moverse sino al gusto de la Inglaterra, i las cosas están de tal suerte, que ha de recibir por rei aquel que convenga a la política de las potencias de Europa. Se escribe de Lóndres que el emperador austriaco quiere que sea rei de España el archiduque Cárlos, i que la Gran Bretaña, a quien interesa la independencia de España, i que en ella no mande un Bonaparte, no pone mala cara a la propuesta. Napoleon es, como sabes, yerno del emperador austriaco, i pariente ya del archiduque, i como habia de haber pacto de famila entre España i Francia tarde o temprano, pudiera ser que distase del negocio, dando otro acomodo a su hermano José.

C.--¿I qué será entonces de mi adorado Fernando?

L.--¡Hombre! déjate de eso. Napoleon no quiere que los Borbones reinen en Europa, por eso los expelió de todos sus puntos de España, Portugal, Italia i aun trabaja por arrancar una ramita de ellos, que se tiene fuerte en Sicilia.

C.--Pero Vd. dijo una vez, que Napoleon ofreció a la Inglaterra dejar en Portugal a su Soberana, con tal que José reinase en España tranquilo.

L.--Como su Soberana no es lesa, bien conoció que posesionado Napoleon de España, luego llevaria el vuelo sobre Portugal. Puede ser que Portugal se trueque por otra cosa mejor.

C.-Eso es... trocar i vender a los pueblos i a los hombres como si fuesen carneros!

L.--Asi es el mundo, i eso sucede porque son carneros los hombres i los pueblos; i tú eres tambien carnero porque eres sarraceno, porque quieres ser esclavo, i que te vendan, te compren, i te apaleen a su gusto.

C.--Yo soi sarraceno por la relijion.

L.-¡Acabarás de rebuznar demonio! Nosotros no solo respetamos a la relijion, sino que es el objeto mas amado de nuestros corazones: hasta ahora nadie insultó al culto: todo sigue como antes, i aun mejor, pues ya sabes las reformas que se han hecho sobre los derechos eclesiásticos, i que en las escuelas que se multiplican por todas partes, se enseña la doctrina cristiana, cosa descuidada ántes, porque era corto el número de escuelas. Acerca de esto hai gran zelo en el Instituto, i todo irá mejor en sentándose las cosas. Ahora voi a hablarte de modo que me entiendas, acomodándome a tu ton

tera.

Díme, santo varon, ¿quién ha de combatir aqui la relijion nacional? No ha de ser el pueblo, que es relijiosísimo; no el gobierno, que ha de ser formado por el pueblo; no los escritores, porque los escritos relijiosos están sujetos a la censura. Asi pues déjate de dar oidos en este punto a fanáticos, a viejas, i a impostores artificiosos. Si tuvieras talento, echarias de ver que para que la relijion se conserve pura en América, es preciso que ésta se ponga no solo fuera del alcance de la autoridad de Europa, sino tambien de su influjo. La pureza de la fé ha padecido mucho en España por el trato i familiaridad con los franceses e ingleses, que ya sabes que no son tan devotos como tú. La España ha de tener un rei; este tal no ha de ser Borbon; con que saca tu la consecuencia, aplicando la brasa a la sardina que quieras. Yo te veía ántes horrorizarte de que no hubiese inquisicion en Francia, pues ya sabes que dicho tribunal se suprimió en España i en todos los puntos de su jurisdiccion, i tu no has dicho ni chus ni mus; tan bribon eres como todo

eso. Tampoco existe aquel tribunal en el Brazil ni en todos los dominios portugueses, lo que te comunico para los efectos que convenga; i tambien te participo, que en dichos dominios está declarada la libertad de conciencia.

C.--Yo soi sarraceno por otras cosas: yo soi fiel vasallo del rei.

L.--Hablemos de buena fé, mi amigo: ¿tu crees que vuelva a su trono Don Fernando de Borbon?

C.--Hablando con pureza, yo no lo creo.

L.--Pues has de tener la bondad de responder a otras preguntitas. La Rejencia de Cádiz que es, i de quién recibió la autoridad?

C.--La Rejencia es una junta, como la de aqui, con sola la diferencia de que aquella rejencia es un poder ejecutivo nombrado por las cortes.

L.-- I aquel congreso tiene poderes para mandar recibidos de D. Fernando de Borbon?

C.--No necesita de tales poderes, porque es congreso soberano como representante del soberano pueblo.

L.--Hablas como un papiniano: en efecto, aquel congreso se llama soberano a causa de la soberanía nacional que ha proclamado el mismo. Yo lo venero como a representante del pueblo español, no como a soberano del pueblo americano a quien no representa. Nosotros somos acá representados en nuestros congresos por nuestros diputados electos legalmente. Un congreso nacional es tan venerable i augusto como un emperador i un rei; i si te digo que mas, no miento, porque la nación es mas que el rei, i es sobre el rei; el rei es un empleado de la

nacion, es un hombre en quien se ha puesto el poder ejecutivo.

C.--A la verdad, que yo no sabia lo que eran los reyes, ni como se hacian los reyes, hasta que vi a Napoleon coronarse de emperador, i no como quiera, sino por la mano de Pio VII.

L.--El mismo Papa ha coronado rei de Roma al hijo de Napoleon. La casa de Bonaparte es ya una de las casas soberanas de Europa: uno de aquella familia es rei de Nápoles, otro de Wesfalia, otro lo fué de Holanda, las hermanas son princesas: el mismo Napoleon ha casado con la hija del emperador de Alemania. De aqui a doscientos años la casa de Bonaparte será tan augusta como lo era la de Borbon. El tiempo borra la oscuridad de los principios. Tu conoces estas i otras cosas, Cacipucio, i con todo siempre eres sarraceno. Tu sabes, que siendo el pueblo americano tan soberano como el pueblo español, no puede justamente el uno mandar al otro: sabes, que una jeneracion no puede esclavizar a las jeneraciones futuras, i que por consiguiente la tolerancia forzada o voluntaria de nuestros abuelos no puede dañarnos, ni destruir nuestra libertad: tú sabes, que naciendo los hombres libres, nadie puede gobernarlos por su gusto i autoridad: en fin, tu tienes ya noticia del catecismo de los patriotas i sabes que los pueblos tienen derechos, i que por tanto no son lo mismo que los carneros. Luego, una de dos: o sois tan perversos i bribones que no reparais en lo justo ni en lo injusto, i todo lo quereis atropellar derramando sangre i haciendo atrocidades por saciar vuestra antigua codicia, ambicion, soberbia i venganza, o fundais vuestro sarracenismo en alguna razon oculta e impenetrable para nosotros, que hasta ahora no habeis publicado, i

que es como el gran secreto, i el misterio sacrosanto de los francmasones escondido eternamente a los ojos profanos.

C.-Nada de eso hai: a lo menos yo no estoi obligado a responder acerca del modo de pensar de mis cofrades: por lo que hace a mí, no soi tan negado que no conozca que ustedes siguen una buena causa, i que la conducta de los gobiernos españoles los hace mui odiosos a los ojos de la razon, como Vd. dijo el otro dia. Me acuerdo que Vd. leyó en el español Blanco estas notables palabras:

Despues de que declararon las cortes que no derivan su autoridad de Fernando, despues que se elijieron sobe ranas a título de la soberanía del pueblo, por soberano debieron reconocer ellas mismas a cualquiera que represente a otro pueblo; i pueblo o nacion es toda aquella porcion de hombres a quienes la naturaleza da medios para vivir en su propio terreno, siempre que puedan defenderlo de la invasion de otros, ora por sus circunstancias físicas, ora por el número o valor de sus habitantes." ¿Porqué pues no han reconocido la soberania de los pueblos americanos?

L.--Mui docto te estoi viendo, Cacipucio; pues esto no lo has adquirido tu en la lójia sarracénica.

C.--Todo usted es una sátira, i con ellas no saca mas que calentarse la cabeza inútilmente.

L.--Dices mui bien; locura es predicar a quienes no oyen el sermon porque están dormidos. Pero sigamos hablando de cosas de estado, que es lo que mas nos conviene. Dime francamente lo que piensas de las cosas actuales.

C.-Yo creo que ni unos ni otros, ni españoles ni americanos se salen con la suya; sino que ha de resultar una tercera entidad de los demonios.