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constituyen nuestras relaciones con los demas hombres, cuya base es la Igualdad.

P. ¿Qué debe el hombre a la creacion?

R. Respeto por la posicion natural de las cosas creadas, cuyo respeto tiene por base la Propiedad.

LECCION TERCERA.

Deberes del hombre para con Dios,

P. ¿Por qué crees que el hombre tiene el deber de adorar a Dios?

R. Porque la adoracion a Dios es una necesidad que nos impone nuestra propia naturaleza. A medida que se desarrollan nuestras facultades, conocemos que nuestro poder humano es limitado, porque no podemos ni crear ni gobernar a nuestro arbitrio las cosas que nos rodean. Esto nos da la idea de una causa superior en la creacion, de un principio autor i regnlador de toda la creacion. Ese principio es Dios: nuestra intelijencia lo concibe, i nuestra conciencia, manifestándonos nuestra debilidad, nos hace buscar en ese principio nuestro apoyo, nuestro amparo i nuestro consuelo. Entónces nuestro corazon ama a Dios como a su creador i protector.

P. ¿Qué entiendes por relijion?

R. La relijion es la union del hombre, por medio del espíritu i del corazon, con el Ser Supremo, causa primitiva que sostiene el universo i lo gobierna segun las leyes que su sabiduría le ha trazado.

P. ¿Basta esa union del hombre con Dios, por medio del espíritu i del corazon, para tributarle adoracion?

R. No, porque el hombre tiene una necesidad

natural de revelar esa íntima union de su espíritu i de su corazon con Dios, i de congregarse con los demas hombres para tributarle su adoracion. Esa manifestacion esterna de nuestra union con Dios se llama Culto, i la congregacion de los hombres relijiosos es lo que se llama Iglesia: por eso decimos que la Iglesia católica, apostólica, romana es la congregacion de los fieles cristianos bajo una cabeza visible, que es el Papa.

P. ¿Es necesaria la relijion i debe el hombre cultivar i satisfacer esa necesidad natural que siente de adorar a Dios?

R. Sí, porque la relijion es la fuente de un sinnúmero de ideas i de actos en nuestra vida, i cuando el hombre no se siente unido a su creador i le olvida, esas ideas se convierten en errores i esos actos se estravian de lo justo. El hombre irrelijioso es un peligro viviente para sí mismo i para la sociedad, por que él necesita, como individuo, de la relijion para elevar su espíritu, para rehabilitar sus fuerzas por medio del consuelo que le ofrece su creador, i para regularizar sus actos segun las leyes divinas; i como miembro de una sociedad, necesita tambien de la relijion para tener un vínculo de fraternidad con sus semejantes.

P¿Cuáles son los estremos viciosos que el hombre debe evitar, como hombre relijioso?

R. El esceptisismo i el fanatismo. Se llama esceptisismo la negacion de toda creencia relijiosa i fanatismo la exajeracion del celo relijioso. El esceptisismo hace a los hombres inmorales, i debemos huir de él, considerando que está en nuestro interes el satisfacer la necesi

dad natural que tenemos de adorar a Dios para ser buenos i merecer sus recompensas. El fanatismo nos hace tambien inmorales, porque la exajeracion del celo relijioso nos hace exaltados i nos conduce a abandonar la razon i a traspasar los límites de los medios ordinarios que ella nos sujiere para sostener nuestras ideas.

LECCION CUARTA.

Deberes del hombre para consigo mismo.

P. ¿Qué es probidad?

R. La probidad u honradez, en que se compendian todos los deberes del hombre para consigo, es una virtud que consiste en el hábito de hacer constantemente el bien, por ser bien en sí mismo i sin consideracion a nuestro interes personal. Por esto la probidad es lo contrario del egoismo, que es el vicio de consultar solo nuestro bien personal, aunque sea contrariando el bien ajeno.

P. ¿Qué se alcanza con la práctica de la probidad?

R. Con la probidad alcanzamos nuestro propio provecho, porque cuando somos probos o rectos, nos granjeamos la estimacion i respeto de los demas. hombres, ouya estimacion i respeto constituyen lo que se llama buena reputacion o fama. La probidad que tiene su base en la rectitud del ánimo i su práctica en la pureza de nuestras acciones, tiene ademas la ventaja de asociar nuestro interes individual con el interes de los demas hombres, i en esta union ofrece una garantía verdadera al bien jeneral. El hombre debe abstenerse de hacer mal, porque así procura su propio bien.

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