VI

Don Nicolas de la Cerda i Sánchez de la Barreda habia nacido en 18 de junio de 1746 (1), i desde temprano habia manifestado inclinaciones al estudio.

A la edad de 21 años se habia matriculado en el curso de leyes de la Universidad de San Felipe.

Con fecha 10 de setiembre de 1768, rindió exámen del primer libro de la Instituta.

Su padre habia comprado para él un grado de indulto (2).

A pesar de este buen principio, no hai constancia en los libros de la Universidad de que don Nicolas continuara su carrera de estudiante.

A la muerte de su hermano mayor se consagró a las faenas agrícolas en la hacienda de la Ligua, i aumentó de un modo considerable las plantaciones de la caña de azúcar.

En 1778 fué elejido alcalde ordinario del cabildo de Santiago, en compañía de don Francisco Javier Valdes.

Hacia ya tres años que don Nicolas habia contraido matrimonio con doña Nicolasa de Santiago Concha i Jiménez de Lobaton, hija del marques de Casa Concha, oidor de la real audiencia de Chile (3)

En su testamento, otorgado a 22 de agosto de 1805 ante el escribano Agustin Diaz, don Nicolas de la Cerda

(1) Papeles del mayorazgo.

(2) Libro índice de la Universidad de San Felipe, pájina 125. Santiago, Imprenta Cervantes, 1898.

(3) Don Melchor de Santiago Concha, nombrado oidor de la audiencia de Chile en 12 de febrero de 1758.

i Sánchez de la Barreda reconoce como hijos suyos i de doña Nicolasa de Santiago Concha a doña Josefa, mujer lejítima de don José de Santiago Concha, oidor decano de la real audiencia de Chile; a don José Nicolas; a doña Mercedes, viuda de don Antonio María Cañas i Aldunate; a doña Dolores, casada con don Pedro de los Alamos i Arcaya; a don Maruel Ramon; a don Francisco, de menores órdenes clericales; a doña María del Cármen; a doña Francisca; a doña Nicolasa; a doña María del Rosario; a don Manuel Francisco; a doña Antonia; a don José Francisco; i a doña María Rosa.

Heredó el mayorazgo don José Nicolas de la Cerda de Santiago Concha, quien debia figurar en primera línea en el memorable año de 1810.

Vore Hicolas Ela

En los libros de la Universidad de San Felipe aparece que don José Nicolas se matriculó en 1793 para estudiar filosofía, i al año siguiente en el segundo curso de física (1); pero su entusiasmo se detuvo en este punto, pues no vuelve a leerse su nombre en el archivo universitario.

En cambio, su firma se halla al pié de la mayor parte de las actas de una corporacion que fué la primera en trabajar por la independencia de Chile.

(1) Libro índice de la Universidad, pájina 125.

MAYORAZGO

II

Con fecha 27 de noviembre de 1809 don José Nicolas de la Cerda remató para sí una vara de rejidor del cabildo de Santiago (1).

Al hacerlo, siguió el ejemplo de su padre i de sus abuelos, todos los cuales, desde el licenciado don Juan de la Cerda i Contreras, habian formado parte de los cabildos de la Colonia.

En 1.o de enero de 1810 el mayorazgo Cerda fué elejido alcalde ordinario, en compañía de don Agustin de Eizaguirre.

Tanto Cerda como Eizaguirre ocupaban alta situacion social i supieron cumplir con los graves deberes del cargo público que se les habia confiado.

Las tropelías cometidas por el presidente García Carrasco mantenian en continua excitacion al vecindario de Santiago.

Los proyectos de un gobierno nacional que entónces empezaban a formularse en voz baja, aumentaban la resistencia contra los atropellos de la autoridad.

Los alcaldes ordinarios recientemente nombrados no se limitaron a resguardar el órden, sino que contribuyeron a poner término al gobierno de un hombre que, como García Carrasco, habia contribuido a exacerbar las pasiones ántes que a calmarlas.

Los nombres de Eizaguirre i de Cerda se encuentran en el acta de la proclamacion de don Mateo de Toro Zambrano como presidente del reino.

Ambos alcaldes intervinieron tambien en un acuerdo

(1) La Revolucion de Chile, por frai Melchor Martínez. Valparaiso, 1848, Véase pájina 31.

debia producir las mas trascendentales conse

que cuencias.

Con fecha 13 de setiembre, el cabildo de Santiago, reunido en casa del presidente Toro Zambrano, persuadió a este majistrado de la necesidad de convocar un cabildo abierto en el cual se discutiera si convenia o nó establecer una junta de gobierno.

El dia señalado para esta reunion fué el 18 de setiembre.

Todo chileno sabe que en este dia memorable se instaló la primera junta de gobierno nacional.

Para juzgar la conducta de don José Nicolas de la Cerda en tales sucesos debe tenerse presente que en la sociedad chilena era uno de los personajes mas considerados, por sus antecedentos de familia, por su gran fortuna, por la honorabilidad de su vida.

El mayorazgo Cerda no podia ignorar que en aquellos dias arriesgaba hasta su misma existencia.

Es indudable que los individuos contrarios a toda innovacion en el sistema de gobierno vijente debieron de hacer grandes esfuerzos para que un criollo rico i digno de respeto como él se alejara del campo patriota, tanto mas cuanto que el oidor decano de la real audiencia, don José de Santiago Concha, se hallaba casado, como se ha leido, con una hermana suya, doña Josefa de la Cerda.

¡Vanos empeños!

Don José Nicolas siguió hasta el fin en la senda que creyó mas conforme con el interes de la patria.

Perteneció al Congreso de 1811 como diputado por Santiago i a una de las juntas de gobierno organizadas por don José Miguel Carrera.

Don José Nicolas de la Cerda se distinguió siempre por la moderacion de sus opiniones; i así se retiró de aquel Congreso cuando empezaron a dominar los radicales, i del mismo modo renunció el cargo de miembro de la junta de gobierno a los tres meses de haber sido nombrado.

A pesar de esta actitud, se le elijió senador en el año de 1812.

Despues del desastre de Rancagua, el mayorazgo Cerda estuvo en peligro de ser enviado a Juan Fernández, en union de los demas patriotas que habian sido vocales de las juntas de gobierno; pero, ya sea por la moderacion de su conducta, ya sea por influencias de su tio i cuñado el oidor Concha, le conmutaron la pena de destierro por una multa de 20,000 pesos, en forma de contribucion voluntaria, que debia pagar por cuartas partes de seis en seis meses (1).

Por estos años contrajo matrimonio con una sobrina suya, que era al mismo tiempo su prima hermana, hija del oidor, doña Nicolasa de Santiago Concha i Cerda, en la cual tuvo numerosa familia.

Durante el gobierno de don Bernardo O'Higgins, don José Nicolas formó parte de la Convencion de 1822, como diputado por la Ligua, i firmó en tal carácter la constitucion política de aquel año.

El último acto público de importancia ejecutado por él fué su intervencion en la abdicacion de O'Higgins. Adversario de la política que habia seguido el fundador de nuestra independencia, Cerda se creyó en el

(1) BARROS ARANA, Historia Jeneral de Chile, tomo 10, pájina 26,

nota 18.