Antolojia chilena: prosistas i poetas contemporáneos; la intelectualidad en Chile

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Imp., enc. i lit. La Ilustracion, 1908 - 411 páginas

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Pasajes populares

Página 41 - Ha cesado la lucha sangrienta; ya es hermano el que ayer invasor, de tres siglos lavamos la afrenta, combatiendo en el campo de honor.
Página 194 - ... cadena. Alguna vez, la bestia, cansada de tan cruento dolor, despierta y pide, con el ruidoso acento de las revueltas locas que encienden las angustias, un pan de limpio trigo para sus fauces mustias. Y ruge, pero entonces ¡oh justa y santa mengua! el plomo o la metralla le destrozan la lengua, o acaso un calabozo sin luz ni amor, en nombre de los amables dioses...
Página 41 - Siempre noble, constante y valiente te encontraron los hijos del Cid. Que tus libres tranquilos coronen a las artes, la industria y la paz, y de triunfos cantares entonen que amedrenten al déspota audaz.
Página 42 - Nuestros pechos serán tu baluarte; con tu nombre sabremos vencer, o tu noble, glorioso estandarte nos verá combatiendo caer.
Página 42 - Con su sangre el altivo araucano nos legó por herencia el valor; y no tiembla la espada en la mano defendiendo de Chile el honor.
Página 40 - CORO Dulce Patria, recibe los votos con que Chile en tus aras juró que o la tumba serás de los libres o el asilo contra la opresión.
Página 50 - Quisiera ser alguna flor nacida entre las flores del jardín ameno, verme por ti del tallo desprendida y marchitarme sobre tu albo seno. Si fuera un astro de la noche umbría de blanca luz, de límpidos destellos, amoroso mi luz reflejaría en ese blanco de tus ojos bellos. Si fuera un pensamiento audaz, profundo, que conmoviera al orbe en un instante, desdeñaría de ocupar el mundo por ocupar tu corazón amante.
Página 376 - Conviniendo ambas partes contratantes con los deseos manifestados por los habitantes del Perú, y con especialidad por los de la capital de Lima, de que se les auxilie con fuerza armada para arrojar de allí al gobierno español, y establecer el que sea análogo a su constitución física y moral, se obligan dichas dos partes contratantes a costear una expedición, que ya está preparada en Chile, con este objeto.
Página 393 - Pero se puede ensanchar el lenguaje, se puede enriquecerlo, se puede acomodarlo a todas las exigencias de la sociedad, y aun a las de la moda que ejerce un imperio incontestable sobre la literatura, sin adulterarlo, sin viciar sus construcciones, sin hacer violencia a su genio.
Página 194 - Es triste y miserable, como la muerte triste la vida de las minas: el hombre, allí no existe; la pobre bestia humana, gastada y sudorosa, arrastra allí sus miembros entre la luz dudosa de míseros candiles, como cualquier gusano. El hombre es en las minas un simulacro humano.

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