de memoria el Salmo diez y nueve de David, como que lo compuso para que el pueblo hiciera oracion á Dios por su Rey al verlo salir á campaña, ó en alguna otra necesidad. Empieza, pues, así: „El Señor "te oiga en el dia de la tribulacion ; el nom"bre de Dios de Jacob te proteja, envián"dote el auxilio desde el cielo , y desde "Sion todo aquel socorro que necesitas. Ten"ga presentes todos tus sacrificios y holo»caustos para darte segun tu corazon, pa"ra confirmar todos tus consejos, y para "cumplir todas tus peticiones. Y concluye: "¡O Señor! salvad á nuestro Rey, y oid » nuestras oraciones en el dia que las hicie»remos en vuestra presencia.« En otro Salmo dice': "Dios mio, dad vuestro juicio al » Rey, y vuestra justicia al hijo del Rey.<< Y en otro: "Añadireis dias sobre los dias "del Rey, y sus años hasta el dia de la » generacion y generacion.<< P. ¿Qué cosa es oracion? I R. Levantar el corazon á Dios para pedirle mercedes. I Psalm. 71. 2. 2 Psalm. 6. v. 7. P. ¿Está obligado el Christiano á hacer ora cion ? R. Sí; porque dice Christo: Velad y orad; pedid y recibireis. P. ¿Hay obligacion de orar por el próximo? R. Sí; porque hay obligacion de amarlo. P. ¿Y qué es lo que hemos de pedir para él? R. Lo primero la salud del alma, y despues lo conveniente á la del cuerpo. P. ¿El vasallo está obligado á hacer oracion por su Rey? R. Sí; porque está obligado á tenerle amor. P. ¿De dónde consta esta obligacion? R. De San Pablo, que dice: Hágase oracion por los Reyes. P. ¿Qué es lo que se ha de pedir para ellos? R. Todas las felicidades espirituales y temporales. P. ¿Los primitivos Christianos qué hacian? R. Rogar á Dios pública y privadamente por la salud de los Emperadores. LECCION XIV. Del temor que los vasallos deben tener Todo vasallo debiera servir y obedecer á su Rey solamente por amor; pero pues no todos obran por este noble respeto á lo ménos deben servirlo y obedecerlo por temor. Temed hijo mio á Dios y al Rey, dice el Espíritu Santo; y pues lo manda, señal es que servir por temor por temor á entrambas- Magestades, es cosa justa y buena. El hombre teme á Dios, no porque pueda presentarsele como mal el que es principio de todos los bienes, sino porque lo cree Autor de todos aquellos males de pena que están preparados á todos los transgresores de su ley. Este temor á la pena es verdad que no hace justo al hombre, pero tampoco hipócrita no es amor, pero dispone para el amor y para la justificacion. El vasallo ha de temer á su Rey, no porque el Rey sea un mal para él, sino porque es una suprema potestad: en cuya mano, y á cuya disposicion están todas las penas impuestas para los vasallos delinqüentes. Es verdad que este temor no lo formará vasallo perfecto y cabal, pero lo moderará, lo contendrá, y lo dispondrá á que lo sea en adelante. sus Quanto hay en Dios, sus palabras, sus obras, sus providencias, sus secretos juicios, es un justo motivo del temor, y aun su misma misericordia lo es tambien, si abusando de ella el hombre, la hace tercera de su pecado. Quanto hay en un Rey, su magestad, su poder, sus leyes, sus providencias, su enojo, su indignacion, su misma real piedad y clemencia abusadas y ofendidas, son y deben ser motivos de temor en el vasallo. Tema, pues, ofenderlo con la impiedad de sus operaciones; porque escrito está : "Que son abominables al Rey los que "obran mal, y que su solio está apoyado "en la justicia.« 1 Tema enojarlo con la desobediencia á sus leyes; porque escrito está : "Que el enojo del Rey es como el „rugido del leon.« Y en otra parte: »El 1 Prov. 16. v. 12. 2 Prov. 19. v. 12. I I "que fuere altivo, y rehusare obedecer los » mandatos del Pontífice, y el decreto del „Juez, morirá, y quitareis el mal de Is»rael.« Tema indignarlo con sus rebeldías; porque escrito está : "Que la indigna"cion del Rey es una cierta precursora del "suplicio y de la muerte. « 2 Tema querer exâminar sus providencias, ó escudriñar los secretos de su corazon; porque escrito está : "Que el corazon » del Rey es inescrutable, y que está todo "en manos de Dios." 3 Tema faltarle en aquella fidelidad que le tiene, no solo prometida, sino jurada; porque escrito está: Que el que no cumple lo que juró, será » lleno de maldad, y no se apartará de su "casa el azote de Dios. « 5 Tema maquinar contra su persona ó contra su vida, aunque sea en lo mas escondido de su casa, y en lo mas secreto de su corazon; porque escrito está "Que las aves del cielo lleva"rán su voz y su delito hasta los oidos del "Soberano; y que nada hay oculto ;° que al 6 |