Los artículos marcados con este signo *, son originales, y los con este †, reformados. Los artículos geográficos son todos del Sr. Lic. D. Manuel Orozco y Berra. A LOS LECTORES. VENCIENDO obstáculos de toda especie comenzamos hoy el tomo en que debe terminar la serie alfabética de nuestros artículos, y solo faltará entonces cumplir la palabra, tantas veces repetida, de recoger en un suplemento lo que pueda haberse á las manos de lo mucho que va echándose de menos en el cuerpo de la obra. Algo mas de dos años han pasado desde que acometimos esta empresa, impulsados, mas bien por nuestro buen deseo, que por la esperanza de llevarla dignamente á cabo. Conforme nos vamos acercando al término, cobramos nuevo ánimo para alcanzarlo; porque si bien nos causa pena volver atrás la vista y contemplar el poco satisfactorio resultado de tantos esfuerzos, no nos faltan por otra parte motivos de aliento y de confianza. Es el mayor sin duda la constante benevolencia de nuestros suscritores, de que suelen verse pocos ejemplos en obras de tan larga duracion. En tanto aprecio la tenemos, que á menudo nos preguntamos á nosotros mismos si hemos sabido corresponder á ella: por fortuna el testimonio de nuestra conciencia nos ha consolado asegurándonos, que si no hemos hecho cuanto nuestros benevolos lectores tendrian derecho á pedirnos, no hemos omitido á lo menos esfuerzo de ningun género para contentar sus deseos y no defraudar sus esperanzas. Sufrirémos que se nos acuse de faltas de entendimiento, pero no estamos dispuestos á confesar ninguna de voluntad. Prueba de todo son los artículos de MEXICO, que despues de haber sido objeto de una atencion particular, sufrieron las mas estrañas vicisitudes, hasta convertirse en lo que nosotros mismos no podiamos figurarnos. Parece que la suerte se empeñó en perseguirlos; y así es que, lejos de dejarnos satisfechos, somos los primeros en conocer sus omisiones y defectos. Mas á pesar de eso, tambien creemos que hay en ellos datos preciosísimos, investigaciones enteramente nuevas y noticias muy curiosas, que en vano se buscarian reunidas en otra parte. En general hemos preferido apuntar cuanto sabiamos, á riesgo de ser tachados de prolijos; nuestro deseo ha sido reunir gran copia de datos seguros, aun cuando no haya estado en nuestra mano darles siempre el buen órden que requieren. Quede esto para los que vengan despues á labrar en el mismo campo, ya que nuestras fuerzas no han alcanzado á mas por ahora. |