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d'une femme de Emilio Girardin en enero de 1882. Enrique de Bornier alabó su ejecución en la una i en la otra de estas piezas.

Este reputado crítico hizo otro tanto con el desempeño de Garnier en el Mitridates de Racine, representado en agosto de 1882.

El de no menos crédito, Luís Ganderax, dice que Garnier hace un excelente Justiniano en la Teodora de Sardou.

He encabezado este artículo con un pasaje de Julio Lemaitre, el escritor mui leído, i justamente estimado aun en estas incultas e ignorantes naciones de la América del Sur, en las cuales, según pretende, una obra de arte no causa mas impresión que la deformidad de una bestia; i voi a concluírlo con otro del mismo autor, tomado de un número del Journal des Débats, correspondiente al último mes de julio.

Léase ese pasaje, que, si no me equivoco, ha de interesar:

«Han llegado al Journal des Débats buenas noticias de Río Janeiro. Los habitantes de ese país han hecho a Sara Bernhardt una acojida digna de ella. El teatro es espacioso, demasiado espacioso: tres órdenes de palco i una platea de ochocientos asientos. El término medio de las recaudaciones es dieziocho mil francos (tres mil seiscientos pesos.) El emperador del Brasil, un emperador mui bondadoso i desencantado, que es emperador únicamente porque se ha visto obligado a serlo, un príncipe que ama a París, i que venía a sentarse en otro tiempo a la mesa de Victor Hugo, asiste a todas las representaciones. En cada una de ellas, hai ovaciones estrepitosas, esplosiones de un entusiasmo tropical. Hombres de una riqueza prodijiosa, que poseen minas de oro i de plata, i millares de hectáreas de cañas de azúcar, hombres de

patillas negras, cubiertos de brillantes como idolos, aguardan a Sara Bernhardt a la salida del teatro, i estienden sus pañuelos en tierra, temiendo que el polvo manche los pies de Fedora o de Teodora; i los buenos negros, atónitos de admiración, la miran con sus ojos de ágata. Sara Bernhardt está contenta, si lo quereis; pero no se divierte mucho. Ella esperimenta el fastidio de los Faraones, la tristeza de no ser nunca espectadora, de no ser nunca una cabeza en la multitud, i el sentimiento que hace decir al Moisés de Alfredo de Vigny:

¡O Seigeur! j'ai vécu puissant et solitaire; laissez-moi m'endormir du sommeil de la terre.

«Esta soledad de la omnipotencia impulsaba a los Césares romanos a la locura furiosa i sangrienta. Nada de esto puede temerse, según me parece, en Sara Bernhardt, pero ella se fastidia, ella piensa en París, i hace bien. La ciudad de Río Janeiro no es bonita: casas azules i rojas, no mui limpias; calles hundidas, surcadas en todos sentidos por los rieles de los tranvías; aceras estrechas, llenas de agujeros, recorridas por negras de enaguas blancas, las cuales venden cosas innominadas, muchedumbre abigarrada i hedionda, de que salen a cada instante cuchilladas sin motivo, i solo por el placer de darlas. Pero la naturaleza es admirable en torno de esta inmundicia humana. María de Neubourg vive en un gran jardín magnífico i frondoso como una floresta vírjen. Ella caza mariposas i aves del paraíso; pero su alma está llena de tristeza, como en el segundo acto de Rui Blas.

«Americanos del Sur, es preciso perdonarla. Americanos del Sur, os hemos enviado lo mejor que tenemos: nuestra mas grande artista, i algunas

de las obras maestras de nuestro teatro. Americanos del Sur, hai, entre nosotros i vosotros, antiguos vínculos de parentesco; vosotros sois, como nosotros, de la raza latina. Vuestros hermanos, los españoles, nos han dado el Cid i Jil Blas. Nosotros amamos a vuestras mujeres, indolentes i apasionadas, de labios rojos, de grandes ojos, tan negros bajo sus pesados párpados, de voz ronca como la de la tórtola. Vosotros sois candorosos, sensuales, bulliciosos, i buenos.

«Nosotros nos hemos divertido a veces en hacer vuestra caricatura en el teatro; pero no nos guardeis resentimiento por ello. Los americanos de nuestros raudevilles, si son a veces grotescos, no son jamás odiosos. Las pobres niñas que, entre nosotros, viven del amor, tienen predilección hacia vosotros, porque sois jenerosos; i os buscan cuando venís a Paris. Los pueblos pedantes e hipócritas del Norte, que os desprecian, nos desprecian también. En seguida, vuestro país se nos figura como un país de sueños. Ignorantes como somos, concebimos el estenso rincón del globo que habitais como uno de los mas divertidos que existen Vosotros teneis el Amazonas, el mayor rio del mundo. Teneis las pampas; teneis las florestas vírjeres, los árboles monstruos, los bosques impenetrables i jigantescos, enguirnaldados por floridas enredaderas, donde centellean pájaros e insectos acorazados de piedras preciosas, i donde se arrastran los boas constrictores. Bernardino de Saint Pierre, Chateaubriand, Leconte de Lisle i José María de Heredia han descrito vuestra fauna i vuestras flores. Vosotros sois eminentemente pintorescos. Os damos las gracias por haber aplaudido nuestros dramas, i festejado a nuestra trájica.»

Habría que rectificar algunas de las aseveraciones contenidas en el precedente pasaje.

Creo que las pinceladas del cuadro son inexactas indudablemente por lo que toca a Chile, i aun res pecto de las rejiones tropicales de América.

Sin embargo, no es esta la oportunidad de discurrir acerca de estos puntos.

Lo que quiero hacer notar, es que, según declaración del mismo Lemaitre, de seguro mui bien informado en la materia, Sara Bernhardt ha recibido en el Brasil, desde el emperador abajo, los mas entusiastas aplausos.

Esas señales de admiración no indican por cierto incapacidad artística.

¿Se habrían dado si se hubiera tratado de un ternero de cinco patas?

FIN

ÍNDICE

I

II

El Hércules Chileno: primer drama compuesto en Chile.-
Representaciones dramáticas en la Serena con motivo
de la exaltación al trono de Fernando VI.-Repre
sentaciones dramáticas i nacimientos durante la pascua
de navidad.-El obispo Aldai se opone al estableci-
miento de un teatro en la capital, sosteniendo una doc-
trina diversa de la patrocinada por el obispo Villarroel.
-Comedias representadas para celebrar el advenimien-
to de Carlos IV al trono de España.-Teatro construído
por Aranaz en Santiago.-Informe de don Juan Ro-
dríguez Ballesteros sobre este establecimiento.-Don
Ignacio Torres pide licencia para que se le permita

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